La grúa autopropulsada LTM 1055 está compuesta por tres ejes convirtiéndola de una de las grúas automotrices más potentes de su categoría. Su avanzada tecnología permite un rápido desarrollo del trabajo ya que dispone de unos avances técnicos contrastados tales como la nivelación automática de los estabilizadores y la colocación automática de las placas de contrapeso utilizando una cerradura avanzada.